En la clase de esta semana he sido consciente de la importancia de la respiración profunda en la práctica del yoga.
- La respiración es lo que te ayuda a hacerte presente,
- te relaja mentalmente dejando que los pensamientos pasen por tu mente y te ayuda a dejarlos volar,
- te ayuda a mejorar en cada asana, ya que con cada inhalación y exhalación, los músculos se relajan permitiendo que llegues aún más lejos, que tu cuerpo de más de si,
- alivia la tensión de tu cuerpo, esa que te produce el estrés del día a día y de la que normalmente no nos damos cuenta,
- lleva un aporte extra de oxígeno a todos tus órganos.
Hemos practicado la respiración ujjayi o respiración del océano. Se llama así por el sonido que se emite con cada inhalación y exhalación, que se asemeja a las olas del mar, llegando a un estado de relajación casi hipnótico.
Para practicar esta técnica hay que tener la columna completamente recta, contraer el abdomen (Uddyana Bandha), el suelo pélvico (Moola Bandha) y cerrar la barbilla contra el pecho (Jalandhara bhanda). Hay que obstruir parcialmente la glotis para que el aire pase rozando y dirigiendo el aire principalmente a la zona intercostal y clavicular.
No es cuestión de ir por la calle haciendo ruidos raros, pero ahora sé que controlando mi respiración y siendo conciente de ella puedo librarme de la ansiedad en momentos puntuales, como por ejemplo un atasco, una discusión en el trabajo, unos niños que tienen un día tonto, etc.
Es como una meditación express, pero sin necesidad de escuchar música relajante, poner incienso o poner la luz tenue.
Cualquier momento es bueno para RESPIRAR, que no se te olvide!!
